martes, 11 de febrero de 2025

Residentes en Altos de San Pedro exigen cierre de centro de rehabilitación sin condiciones adecuadas



Jesús Sánchez 


San Pedro de Macorís 

Residentes en el sector Altos de San Pedro mostraron su  preocupación por la operación del Centro de Rehabilitación Escogidos de Dios, el cual está ubicado en la calle Dorcas Silva, esquina calle Tercera. Aseguran que el centro no reúne las condiciones mínimas necesarias para funcionar y representa un peligro tanto para los internos como para la comunidad.

Según dirigentes comunitarios, el centro opera en una vivienda familiar de tres habitaciones, a las cuales se ha improvisado una cuarta en la sala para alojar a un total de 28 personas con problemas de drogadicción y alcoholismo. La casa cuenta con un solo baño y no dispone de espacios adecuados para la recreación o el esparcimiento de los internos, quienes pasan gran parte del tiempo en la acera, lo que aumenta la inseguridad en la zona.

“Es un riesgo constante”, señalaron los vecinos. “No solo para los internos, sino también para los residentes, en especial los niños y las personas mayores. La casa no tiene las condiciones para funcionar como un centro de rehabilitación, y la comunidad vive con el temor de posibles daños personales o materiales”, agregaron.

 

El presidente de la Junta de Vecinos, José Ramón Mota Pichardo, y la señora Ángela María Reyes Ortiz, en representación de los demás miembros del sector, sostuvieron que han llevado comunicaciones a diversas autoridades locales, como la procuradora fiscal de San Pedro de Macorís, Zuleika Mateo,, el director regional de la Policía Nacional, el director provincial de Salud, Juan Ramón de los Santos, el director de Medio Ambiente, Juan Bautista, la gobernadora Yovanis Baltazar, la senadora Aracelis Villanueva, el alcalde Raimundo Ortiz y la presidenta de la Unión de Juntas de Vecinos, solicitando una intervención inmediata.

Dijeron además que en una reunión con el pastor José Luis Ogando, encargado del centro, les expresaron su preocupación y le pidieron una explicación sobre las condiciones del lugar. El pastor admitió que la fundación es de carácter privado y que anteriormente operaba en Higüey, pero que aún no cuentan con los permisos locales necesarios para funcionar en San Pedro de Macorís. Según Ogando, los permisos están en proceso y serán entregados al presidente de la Junta de Vecinos.

 

Sin embargoaseguran que, a pesar de haberle otorgado un plazo de una semana para presentar dichos permisos, estos nunca fueron entregados. Ante esta situación, los vecinos han decidido continuar con sus gestiones y mantener su postura de no permitir que el centro siga operando en su comunidad sin cumplir con los requisitos legales y de seguridad.

 

“No se trata de estar en contra de la rehabilitación de estas personas, pero debe hacerse en un lugar adecuado, con las condiciones necesarias para garantizar su bienestar y el de quienes vivimos aquí”, afirmaron.

 

Además, señalaron que en San Pedro de Macorís existen otras instituciones como Hogar CREA, que cuentan con los permisos y las condiciones adecuadas para atender este tipo de casos, por lo que consideran que no hay justificación para que una vivienda familiar sea utilizada para estos fines.

 

Los residentes también han denunciado que han tenido que realizar inversiones en verjas de protección para salvaguardar sus hogares ante posibles incidentes. Aseguran que seguirán presionando a las autoridades para que intervengan y garanticen la seguridad del sector.


Fuente El Tiempo 

Fallas en la supervisión de edificaciones y en la respuesta de emergencia generan preocupan en instituciones de socorro en el Este




Jesús Sánchez 


San Pedro de Macorís 

El colapso de una edificación de tres niveles en el municipio de La Romana dejó al descubierto graves fallas en la supervisión de construcciones y las limitaciones de los equipos de respuesta de emergencia, según manifestó Starling Leger, director regional Este de la Defensa Civil.

Leger explicó que la estructura colapsada carecía de los permisos necesarios del Ayuntamiento, el Ministerio de Obras Públicas, el Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores (CODIA) y el Cuerpo de Bomberos. “En los barrios es común que las construcciones se realicen sin supervisión técnica ni intervención de profesionales calificados, lo que incrementa la vulnerabilidad”, afirmó.

 

El desplome afectó dos niveles inferiores de la edificación, mientras el tercer nivel quedó suspendido, lo que complicó las labores de rescate. “La falta de planos estructurales dificultó la operación, ya que sin esta documentación los rescatistas deben improvisar sobre la marcha, lo que atrasa las maniobras y pone en mayor riesgo a las personas”, explicó Leger.

 

Debilidades en la respuesta de emergencia

 

El Director Regional de la mencionada institución también alertó sobre la falta de equipos especializados y personal capacitado en varias provincias del Este. Mientras San Pedro de Macorís cuenta con personal entrenado en búsqueda y rescate de estructuras colapsadas (USAR), no dispone de los equipos necesarios para operar con eficiencia. En el caso de La Romana, ni siquiera existe un equipo especializado de este tipo.

 

Para el operativo en La Romana fue necesario movilizar unidades avanzadas como la UNDRI (Defensa Civil), URON (Bomberos del Distrito Nacional) y UHE (Unidad Humanitaria de Emergencia del Ejército), que trabajaron durante más de 12 horas para controlar la situación. “Un evento local se convirtió en uno nacional por la falta de capacidad de respuesta regional. Esto nos hace vulnerables ante emergencias simultáneas”, señaló Leger.

 

Llamado a la prevención y coordinación

 

Leger insistió en la importancia de la prevención y en la necesidad de que las autoridades municipales y provinciales trabajen de manera coordinada para supervisar las construcciones y garantizar el cumplimiento de las normativas. “La seguridad debe ser prioridad, y regularizar las edificaciones puede salvar vidas”, concluyó.