¿Terremotos en Haití o guerra de quinta dimensión?

Por Rafael Núñez

Es innegable que la isla Española ha sido sometida a distintos tipos de terremotos desde la época colonial hasta nuestros días, teniendo como víctimas fundamental a los pobladores menos protegidos.

Desde que España, Inglaterra, Francia y Holanda (en menor medida) se enfrascaron en una lucha feroz por conquistar los territorios americanos, La Española se convirtió en una fuente de disputa entre los colonizadores, como pasaron a ser los territorios de Cuba, Puerto Rico, Jamaica, Dominica, Guadalupe, San Martin, Saint Kitts y otras ambicionadas tierras de “Nuestra América”, como le llamó el apóstol cubano José Martí.El Maestro de la política, intelectual insigne y ex presidente de la República, profesor Juan Bosch, escribió la más completa Historia del Caribe: De Cristóbal Colón a Fidel Castro, El Caribe Frontera Imperial. Bosch relata con todos los detalles cómo se lanzaron las potencias europeas de entonces, como buitres, en una disputa sin cuartel para depredar nuestros territorios.

Esos terremotos ocasionados por los colonizadores tienen siglos de historia, se han sentido políticamente en nuestros pueblos, pero con mayor saña contra Haití. Es cierto que la isla que compartimos República Dominicana y Haití tiene la particularidad de una formación geológica cuya superficie no es una cubierta continua y uniforme, como dicen los geólogos, sino que nuestro territorio está formado por diferentes piezas (como si fueran partes de un rompecabezas), denominadas placas tectónicas, que están permanentemente en movimiento y que en muchos puntos del planeta, chocan unas con otras.Todo eso es cierto, y también es verdad que La Española es el punto de coincidencia oblicua de las placas de Norteamérica y El Caribe, las fallas Septentrional y la Enriquillo; esta última que nace en el lago del mismo nombre, en territorio quisqueyano y es donde se originó el terremoto del pasado 12 de enero en Puerto Príncipe. Las fallas Septentrional y Enriquillo son las líneas divisorias entre las placas de Norteamérica y del Caribe.Sin embargo, otros terremotos de carácter geopolítico han afectado a nuestra isla. Haití, por ejemplo, se convirtió en el primer país que declaró su independencia y la abolición de la esclavitud al mismo tiempo, en el año de 1804.

Cuando ocurrió el terremoto del 3 de junio de 1770, Haití se encontraba bajo el dominio de Francia, nación que mantenía una lucha sin cuartel por retener los dominios que, a sangre y fuego, había conquistado en El Caribe y otras regiones de América. Aquel movimiento telúrico, con una magnitud de 7.5 en la escala de MSK también devastó la ciudad de Puerto Príncipe. Mientras los franceses luchaban por el territorio que es hoy Haití, y también por quitarle a España la parte oriental, los esclavos traídos de Africa que laboraban en los ingenios azucareros haitianos, trabajaban por su libertad e independencia, liderados por Toussaint Louverture, uno de los pocos esclavos que sabía leer y escribir.Conseguida la abolición de la esclavitud en 1804, Francia no le perdonó la derrota que sufrieron las fuerzas napoleónicas de parte de los ex esclavos haitianos.

Y como “recompensa” de su derrota exigió una indemnización que estuvieron pagando los haitianos hasta el otro día.Después llegaron los terremotos de las invasiones norteamericanas de 1888 y de 1915-1934, esta última la más prolongada. Los haitianos tuvieron que padecer el sismo de la dictadura duvalierista (1957-1986). En los primeros días del terremoto del 12 de enero de este año, muchos países acudimos en auxilio de los haitianos, pero el dominio de la nación más poderosa del planeta se hizo sentir desde su llegada. Se especula en ambientes científicos que el terremoto y su secuela de réplicas tienen el origen en pruebas que realiza Estados Unidos en su llamado Programa de Investigación de Aurora Activa de Alta Frecuencia (HAARP), que supuestamente lleva a cabo la manipulación del clima y fenómenos naturales para generar terribles catástrofes, teoría que no se ha comprobado.
Fuente: http://www.presidencia.gob.do/