San Pedro de Macorís, RD.-
El Colegio Pestalozzi celebró su XIII Graduación de Conclusión de la Secundaria, fue una investidura caracterizada por la solemnidad y la formalidad que provoca el ambiente de la Parroquia San José Obrero, el acto fue dividido en dos momentos;
Primero el sacerdote Marcelino Mieses celebró una eucaristía en acción de gracias por los graduandos, invintandolos a mantener el vínculo de familia eduactiva y a poner sus proyectos en manos del Señor, dada la bendición se desarrolló un segundo momento para la ceremonia académica, el discurso de gracias fue pronunciado por la estudiante Mariangel Calderón Martínez, Ramón Díaz, director docente pronunció un mensaje a los graduandos por las autoridades educativas del colegio y las palabras de exhortación fueron dadas por Bolivar Yunior Sosa Soriano, fundador del Pestalozzi; sus palabras se resumen en 3 elementos; primero la fe empleada en todo el proceso de la constucción de la vida, segundo la discplina que han de cultivar en la gestación de su marca tanto profesional como personal y un último elemento la humildad con que deben manejarse ante los acontecimientos que se presentaran en el caminar por el mundo. Varios estudiantes recibieron reconocimientos y méritos por su buen desempeño durante sus estudios, obteniendo el Premio Pestalozzi el graduando Diosiris Concepción, máximo galardón académico que otorga cada año la institución educativa.
Con esta graduacion el colegio entrega a la sociedad 26 nuevos bachilleres listos para cursar sus estudios universitarios y para continuar enfrentado los desafios que tienen por delante, como lo han venido haciendo los cientos de graduandos que han pasado por las aulas formadoras del Colegio Pestalozzi.
Durante el evento los graduados reconocieron a los profesores; Ramón Díaz, José Luis Nolasco, Ibis Tejeda, Osiris Alfonseca, Kelvin Sánchez, Junior Jules y Ander Pineda, tambien recibieron méritos varios padres y madres que colaboraron con su promoción. Un punto interesante en el acto lo constituyó el traspaso de responsabilidad de una generación a otra, un singular gesto donde una comisión de graduandos entregan las banderas de la nación y del colegio a estudiantes del último grado de secundaria, para que como hermanos mayores del colegio continúen llevando en alto la nación y la institución que los forma, para tal responsabilidad los estudiantes se comprometen a ser el relevo en los proyectos y tradiciones de las proximas generaciones del colegio.
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